El agua puede actuar como una fuente importante de difusión de enfermedades. Por ello, se deben tomar las medidas oportunas para prevenir los riesgos asociados a su consumo. La actual legislación marca los criterios microbiológicos y fisicoquímicos a tener en cuenta en función del tipo de agua y su procedencia.

Parámetros a analizar: Cloro libre, Cloro total, Cloro combinado, pH, propiedades organolépticas, Amonio, Cloruros, Conductividad, Hierro, Materia Orgánica, Nitratos, Nitritos, Sulfatos, Turbidez, Bacterias aerobias a 22ºC, Coliformes totales, Coliformes fecales (Escherichia coli), Clostridium perfringens, Enterococos.